lunes, 25 de julio de 2016

¡LA VIDA CRISTIANA NO ES UNA FASCINACIÓN:ES UNA VERDAD.ES JESUCRISTO!

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En una de sus lindas homilías del Papa Francisco sobre Jesús:El camino, la Verdad y la Vida. el Papa Francisco sacudió muchas conciencias y habló de los cristianos momias espirituales;cristianos testarudos y vagabundos.

Momias espirituales’
El Papa se detuvo sobre las características de esos cristianos que están confundidos, empezando por el cristiano que ‘no camina’, que parece que está como embalsamado:

«Un cristiano que no camina, que no hace camino, es un cristiano no cristiano. No se sabe lo que es. Es un cristiano un poco ‘paganizado’: está allí, estancado, no va adelante en la vida cristiana, no hace florecer las Bienaventuranzas en su vida, no hace las obras de misericordia… Está parado. Perdónenme la palabra, pero es como si fuera una ‘momia’, allí.., una ‘momia espiritual’. Y hay cristianos que son ‘momias espirituales’. Parados, allí. No hacen daño, pero no hacen el bien’».


Los testarudos y los vagabundos
También hay cristianos porfiados. Si bien, cuando se camina es posible que uno se equivoque de camino, eso no es lo peor, Francisco advirtió que «la tragedia es ser testarudo y decir: ‘éste es el camino’. Y no dejar que la voz del Señor nos diga que no lo es, que nos diga: ‘vuelve atrás y toma el camino verdadero’. Luego, la cuarta categoría, la de los cristianos que ‘caminan, pero no saben dónde van’:

«Son errantes en la vida cristiana, vagabundos. Su vida es un ir dando vueltas, aquí y allá, y así se pierden la belleza de acercarse a Jesús, al camino de Jesús. Pierden el camino, porque van dando vueltas, y tantas veces ese vagabundear, los lleva a una vida sin salida: el vagabundear demasiado se transforma en un laberinto y después no saben cómo salir. Han perdido esa llamada de Jesús. No tienen brújula para salir y dan vueltas, buscan. Hay otros que en el camino quedan seducidos por una belleza, por algo, y se quedan a mitad de camino, fascinados por lo que ven, por una idea, una propuesta, un paisaje… ¡Y se detienen! ¡La vida cristiana no es una fascinación: es una verdad! ¡Es Jesucristo!».

Preguntémonos cómo vamos caminando
¿Cómo va el camino cristiano que empecé en el Bautismo? ¿Estancado? ¿Equivocado? ¿Vagabundeando espiritualmente? ¿Me detengo ante lo que me gusta: mundanidad, vanidad? O sigo siempre hacia adelante, haciendo que sean concretas las Bienaventuranzas y las obras de misericordia…

Publicado en Facebook de Pepe Galep el: 19/07/2016

lunes, 18 de julio de 2016

LO QUE SACERDOTES, RELIGIOSOS Y LAICOS DEBEMOS CONOCER.
LA VERDADERA DEVOCIÓN EN LA MISA. NO TE ALEJES DEL ALTAR SIN DERRAMAR LÁGRIMAS DE DOLOR Y DE AMOR A JESÚS CRUCIFICADO POR TU SALVACIÓN

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Padre Pío de Pietrelcina y la Misa

En 1974 se publicó una obra en italiano, titulada «Cosí parlò Padre Pio»: «Así habló el Padre Pio» (San Giovanni Rotondo, Foggia, Italia), con el imprimatur de Mons. Fanton, obispo auxiliar de Vincencia.
En este presente trabajo sacamos algunos pasajes en los que el Padre Pío hablaba de la Santa Misa:

Padre, ¿ama el Señor el Sacrificio?
Sí, porque con él regenera el mundo.

¿Cuánta gloria le da la Misa a Dios?
Una gloria infinita.

¿Qué debemos hacer durante la Santa Misa?
Compadecernos y amar.

Padre, ¿cómo debemos asistir a la Santa Misa?
Como asistieron la Santísima Virgen y las piadosas mujeres. Como asistió San Juan al Sacrificio Eucarístico y al Sacrificio cruento de la Cruz.

Padre, ¿qué beneficios recibimos al asistir a la Santa Misa?
No se pueden contar. Los veréis en el Paraíso. Cuando asistas a la Santa Misa, renueva tu fe y medita en la Víctima que se inmola por ti a la Divina Justicia, para aplacarla y hacerla propicia. No te alejes del altar sin derramar lágrimas de dolor y de amor a Jesús, crucificado por tu salvación. La Virgen Dolorosa te acompañará y será tu dulce inspiración.

Padre, ¿qué es su Misa?
Una unión sagrada con la Pasión de Jesús. Mi responsabilidad es única en el mundo -decía llorando.

¿Qué tengo que descubrir en su Santa Misa?
Todo el Calvario.
Padre, dígame todo lo que sufre Vd. durante la Santa Misa.
Sufro todo lo que Jesús sufrió en su Pasión, aunque sin proporción, sólo en cuanto lo puede hacer una creatura humana. Y esto, a pesar de cada uno de mis faltas y por su sola bondad.

Padre, durante el Sacrificio Divino, ¿carga Vd. nuestros pecados?
No puedo dejar de hacerlo, puesto que es una parte del Santo Sacrificio.

¿El Señor le considera a Vd. como un pecador?
No lo sé, pero me temo que así es.

Yo lo he visto temblar a Vd. cuando sube las gradas del Altar. ¿Por qué? ¿Por lo que tiene que sufrir?
No por lo que tengo que sufrir, sino por lo que tengo que ofrecer.

¿En qué momento de la Misa sufre Vd. más?
En la Consagración y en la Comunión.

Padre, esta mañana en la Misa, al leer la historia de Esaú, que vendió su primogenitura, sus ojos se llenaron de lágrimas.
¡Te parece poco, despreciar los dones de Dios!

¿Por qué, al leer el Evangelio, lloró cuando leyó esas palabras: «Quien come mi carne y bebe mi sangre»...?
Llora conmigo de ternura.

Padre, ¿por qué llora Vd. casi siempre cuando lee el Evangelio en la Misa?
Nos parece que no tiene importancia el que un Dios le hable a sus creaturas y que ellas lo contradigan y que continuamente lo ofendan con su ingratitud e incredulidad.

Su Misa, Padre, ¿es un sacrificio cruento?
¡Hereje!

Perdón, Padre, quise decir que en la Misa el Sacrificio de Jesús no es cruento, pero que la participación de Vd. a toda la Pasión si lo es. ¿Me equivoco?

Pues no, en eso no te equivocas. Creo que seguramente tienes razón.

¿Quien le limpia la sangre durante la Santa Misa?
Nadie.

Padre, ¿por qué llora en el Ofertorio?
¿Quieres saber el secreto? Pues bien: porque es el momento en que el alma se separa de las cosas profanas.

Durante su Misa, Padre, la gente hace un poco de ruido.
Si estuvieses en el Calvario, ¿no escucharías gritos, blasfemias, ruidos y amenazas? Había un alboroto enorme.

¿No le distraen los ruidos?
Para nada.

Padre, ¿por qué sufre tanto en la Consagración?
No seas malo... (no quiero que me preguntes eso...).

Padre, ¡dígamelo! ¿Por qué sufre tanto en la Consagración?
Porque en ese momento se produce realmente una nueva y admirable destrucción y creación.

Padre, ¿por qué llora en el Altar y qué significan las palabras que dice Vd. en la Elevación? Se lo pregunto por curiosidad, pero también porque quiero repetirlas con Vd.

Los secretos de Rey supremo no pueden revelarse sin profanarlos. Me preguntas por qué lloro, pero yo no quisiera derramar esas pobres lagrimitas sino torrentes de ellas. ¿No meditas en este grandioso misterio?

Padre, ¿sufre Vd. durante la Misa la amargura de la hiel?
Sí, muy a menudo...

Padre, ¿cómo puede estarse de pie en el Altar?
Como estaba Jesús en la Cruz.

En el Altar, ¿está Vd. clavado en la Cruz como Jesús en el Calvario?
¿Y aún me lo preguntas?

¿Como se halla Vd.?
Como Jesús en el Calvario.

Padre, los verdugos acostaron la Cruz de Jesús para hundirle los clavos?
Evidentemente.

¿A Vd. también se los clavan?
¡Y de qué manera!

¿También acuestan la Cruz para Vd.?
Sí, pero no hay que tener miedo.

Padre, durante la Misa, ¿dice Vd. las siete palabras que Jesús dijo en la Cruz?
Sí, indignamente, pero también yo las digo.

Y ¿a quién le dice: «Mujer, he aquí a tu hijo»?
Se lo digo a Ella: He aquí a los hijos de Tu Hijo.

¿Sufre Vd. la sed y el abandono de Jesús?
Sí.

¿En qué momento?
Después de la Consagración.

¿Hasta qué momento?
Suele ser hasta la Comunión.

Vd. ha dicho que le avergüenza decir: «Busqué quien me consolase y no lo hallé». ¿Por qué?
Porque nuestro sufrimiento, de verdaderos culpables, no es nada en comparación del de Jesus.

¿Ante quién siente vergüenza?
Ante Dios y mi conciencia.

Los Angeles del Señor ¿lo reconfortan en el Altar en el que se inmola Vd.?
Pues... no lo siento.

Si el consuelo no llega hasta su alma durante el Santo Sacrificio y Vd. sufre, como Jesús, el abandono total, nuestra presencia no sirve de nada.
La utilidad es para vosotros. ¿Acaso fue inútil la presencia de la Virgen Dolorosa, de San Juan y de las piadosas mujeres a los pies de Jesús agonizante?

¿Qué es la sagrada Comunión?
Es toda una misericordia interior y exterior, todo un abrazo. Pídele a Jesús que se deje sentir sensiblemente.

Cuando viene Jesús, ¿visita solamente el alma?
El ser entero.

¿Qué hace Jesús en la Comunión?
Se deleita en su creatura.

Cuando se une a Jesús en la Santa Comunión, ¿que quiere que le pidamos al Señor por Vd.?
Que sea otro Jesús, todo Jesús y siempre Jesús.

¿Sufre Vd. también en la Comunión?
Es el punto culminante.

Después de la Comunión, ¿continúan sus sufrimientos?
Sí, pero son sufrimientos de amor.

¿A quién se dirigió la última mirada de Jesús agonizante?
A su Madre.

Y Vd., ¿a quién mira?
A mis hermanos de exilio.

¿Muere Vd. en la Santa Misa?
Místicamente, en la Sagrada Comunión.

¿Es por exceso de amor o de dolor?
Por ambas cosas, pero más por amor.

Si Vd. muere en la Comunión ¿ya no está en el Altar? ¿Por qué?
Jesús muerto, seguía estando en el Calvario.

Padre, Vd. a dicho que la víctima muere en la Comunión. ¿Lo ponen a Vd. en los brazos de Nuestra Señora?
En los de San Francisco.

Padre, ¿Jesús desclava los brazos de la Cruz para descansar en Vd.?
¡Soy yo quien descansa en El!
¿Cuánto ama a Jesús?
Mi deseo es infinito, pero la verdad es que, por desgracia, tengo que decir que nada, y me da mucha pena.

Padre, ¿por qué llora Vd. al pronunciar la última frase del Evangelio de San Juan: «Y hemos visto su gloria, gloria como de Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad»?
¿Te parece poco? Si los Apóstoles, con sus ojos de carne, han visto esa gloria, ¿cómo será la que veremos en el Hijo de Dios, en Jesús, cuando se manifieste en el Cielo?

¿Qué unión tendremos entonces con Jesús?
La Eucaristía nos da una idea.

¿Asiste la Santísima Virgen a su Misa?
¿Crees que la Mamá no se interesa por su hijo?

¿Y los ángeles?
En multitudes.

¿Qué hacen?
Adoran y aman.

Padre, ¿quién está más cerca de su Altar?
Todo el Paraíso.

¿Le gustaría decir más de una Misa cada día?
Si yo pudiese, no querría bajar nunca del Altar.

Me ha dicho que Vd. trae consigo su propio Altar...
Sí, porque se realizan estas palabras del Apóstol: «Llevo en mi cuerpo las señales del Señor Jesús» (Gal. 6, 17), «estoy crucificado con Cristo» (Gal. 2, 19) y «castigo mi cuerpo y lo esclavizo» (I Cor. 9, 27).

¡En ese caso, no me equivoco cuando digo que estoy viendo a Jesús Crucificado!
(No contesta).

Padre, ¿se acuerda Vd. de mí durante la Santa Misa?
Durante toda la Misa, desde el principio al fin, me acuerdo de tí.

La Misa del Padre Pío en sus primeros años duraba más de dos horas. Siempre fue un éxtasis de amor y de dolor. Su rostro se veía enteramente concentrado en Dios y lleno de lágrimas. Un día, al confesarme, le pregunté sobre este gran misterio:

Padre, quiero hacerle una pregunta.
Dime, hijo.

Padre, quisiera preguntarle qué es la Misa.
¿Por qué me preguntas eso?

Para oírla mejor, Padre.
Hijo, te puedo decir lo que es mi Misa.

Pues eso es lo que quiero saber, Padre.
Hijo mío, estamos siempre en la cruz y la Misa es una continua agonía.

Tradición Católica de noviembre de 1998

Publicado en Facebook de Pepe Galep el: 12/07/2016

viernes, 15 de julio de 2016

SAN BENITO DE NURSIA  

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San Benito nació de familia rica en Nursia, región de Umbría, Italia, en el año 480.

Decepcionado por el estilo de vida de la ciudad, se retiró de la ciudad a Enfide (la actual Affile), para dedicarse al estudio y practicar una vida de rigurosa disciplina ascética. No satisfecho de esa relativa soledad, a los 20 años se fue al monte Subiaco bajo la guía de un ermitaño y viviendo en una cueva.

Tres años después se fue con los monjes de Vicovaro. No duró allí mucho ya que lo eligieron prior pero después trataron de envenenarlo por la disciplina que les exigía.

Con un grupo de jóvenes fundó su primer monasterio en en la montaña de Cassino en 529 y escribió la Regla, cuya difusión le valió el título de patriarca del monaquismo occidental. Fundó numerosos monasterios, centros de formación y cultura capaces de propagar la fe en tiempos de crisis.

San Benito predijo el día de su propia muerte, que ocurrió el 21 de marzo del 547, pocos días después de la muerte de su hermana, santa Escolástica. Desde finales del siglo VIII muchos lugares comenzaron a celebrar su fiesta el 11 de julio.

La medalla de San Benito

La medalla de San Benito es un sacramental reconocido por la Iglesia con gran poder de exorcismo. Como todo sacramental, su poder está no en si misma sino en Cristo quien lo otorga a la Iglesia y por la fervorosa disposición de quién usa la medalla.

Descripción de la medalla:

Medalla de San BenitoEn el frente de la medalla aparece San Benito con la Cruz en una mano y el libro de las Reglas en la otra mano, con la oración: "A la hora de nuestra muerte seamos protegidos por su presencia". (Oración de la Buena Muerte).

El reverso muestra la cruz de San Benito con las letras:

C.S.P.B.: "Santa Cruz del Padre Benito"
C.S.S.M.L. : "La santa Cruz sea mi luz" (crucero vertical de la cruz)
N.D.S.M.D.: "y que el Dragón no sea mi guía." (crucero horizontal)

En círculo, comenzando por arriba hacia la derecha:

V.R.S. : "Abajo contigo Satanás"
N.S.M.V. : "para de atraerme con tus mentiras"
S.M.Q.L. : "Venenosa es tu carnada"
I.V.B. : "Trágatela tu mismo".
PAX : "Paz"


Publicado en Facebook de Pepe Galep el: 11/07/2016

martes, 5 de julio de 2016

CORDEROS ENTRE MEDIO DE LOBOS

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Hoy por hoy cuesta a muchos enfrentar a los lobos de dientes grandes que se tragan todos los conceptos de enseñanza cristianas en la vida éducativa, académica, laboral, política,económica etc como también los hay en la propia Iglesia en la que hay muchos lobos vestidos de oveja y que viven de la religión como refugio y como medio para engañar y lucrar y además de ser indolentes al sufrimiento de los fieles.

Pues ante estas clases de lobos el Señor nos ha dado un espíritu de valentía para desenmascararlos, defender la fe, el evangelio y a Jesús en toda su plenitud de vida, humana y espiritual. La indiferencia, la cobardía la conveniencia de los corderos hacen que se mantengan en una inacción o pasividad aterrorizante.

Los laicos católicos como miembros de la Iglesia estamos llamados a salir del encierro y aislamiento para no enfrentar al mundo con total indiferencia ante las difusiones de confusiones conceptuales e ideológicos del significado de la vida en todas las fases del crecimiento o desarrollo humano. Ahora se vive sin Dios, el creyente va perdiendo la Fe y va incurriendo cada vez más en ignoranica, pereza e indiferencia ante la demolición de los valores y principios éticos morales y espirituales en todo ámbito humano.

El individualismo y egoismo ha calado tanto en los corazones y mente de los fieles y hasta de los mismos sacerdotes que les resulta más fácil predicar el evangelio encerrado en sus cuatro paredes y no salir afuera allí donde es difícil llevar la Palabra de Dios con sentido concreto y real en ambientes secularizados, incrédulos y contrarios a nuestras formas de pensar y de vivir. Bueno como ya no podemos esperar siquiera que los sacerdotes den muestra de Fe por las calles predicando en el silencio con su sóla envestidura de identidad eclesial porque se averguenzan o sienten miedo de llevar sotana por las calles nos queda a los laicos de vocación cristiana real tener que hacerlo.

Nos corresponde a nosotros enfrentar a los lobos con autoridad política, académica o religiosa que quieren alterar la ecología social y natural y sobre todo de aquellas fuerzas destructivas que hipocritamente nos califican de intolerantes y retrógados discriminadores , cuando ellos son los lobos cristianofóbicos, maternofóbicos, destructores y sembradores de violencia que quieren acallarnos totalmente para convertirnos en pasivos infieles del Evangelio y de la doctrina social de la Iglesia.

Hoy Jesús nos envía igualmente como corderos en medio de lobos para enfrentarlos en el mundo con la fuerza de su Espíritu y de su sabiduría Divina. Por eso debemos desenmascarar a los lobos con autoridad que nos imponen lo que debemos pensar, hacer, leer y vivir como si fuera la verdad total y feliz para nuestras vidas.

Que el Espíritu Santo nos acompañe y la Virgen María nos proteja en una verdadera misión de entrega de la vida por Jesucristo nuestro Señor.



Publicado en Facebook de Pepe Galep el: 04/07/2016