miércoles, 17 de agosto de 2016

DESDE LA CONCEPCIÓN SE ENCUENTRA EL YO DIVINO y POR TANTO EL ABORTO ES REBELIÓN CONTRA DIOS Y SOBERBIA DIABÓLICA DE QUIEN LO REALIZA


Visítanos en el Facebook Pepe Galep: https://www.facebook.com/ong.sincomponenda?fref=t 



CATECISMOS: 2271 Desde el siglo primero, la Iglesia ha afirmado la malicia moral de todo aborto provocado. Esta enseñanza no ha cambiado; permanece invariable. El aborto directo, es decir, querido como un fin o como un medio, es gravemente contrario a la ley moral.

No matarás el embrión mediante el aborto, no darás muerte al recién nacido. (Didajé, 2, 2; Bernabé, ep. 19, 5; Epístola a Diogneto 5, 5; Tertuliano, apol. 9). 

Dios, Señor de la vida, ha confiado a los hombres la excelsa misión de conservar la vida, misión que deben cumplir de modo digno del hombre. Por consiguiente, se ha de proteger la vida con el máximo cuidado desde la concepción; tanto el aborto como el infanticidio son crímenes abominables (GS 51, 3).

Un católico que no defiende la vida y que apoya a los políticos abortistas no conoce el amor de Dios que nos eligió para venir a este mundo para que desde la concepción desarrollemos nuestra vida en el bien y seamos una unidad en cuerpo alma y espíritu .

Aquellos que alguna vez directa o indirectamente incurrieron en pecado de aborto por ignorancia o no, mediante un profundo arrepentimiento volverán al estado de Gracia como lo señaló el profeta isaías (1:18) "Venid ahora, y razonemos --dice el SEÑOR-- aunque vuestros pecados sean como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; aunque sean rojos como el carmesí, como blanca lana quedarán"

Publicado en Facebook de Pepe Galep el:  30/07/2016